top of page
Buscar

Filosofía trágica

Antonio Guerrero


"Con el fin de crear un orden permanente la sociedad de nutre de desordenes temporales"

Siento a veces que todo lo que sucede no sucede en realidad. Y amen de conocer la veracidad de algunos hechos se me antoja que unos acontecimientos nutren a otros y viceversa. Si ocurre, así, una determinada catástrofe siempre son los grupos, asociaciones y redes, quienes se apropian de la noticia y la hacen suya hasta el punto de versionarla y beneficiarse de ella. Tiempo después la gente de a pié inicia el espectáculo de la tragedia, ya manipulada previamente, para convertirla en una catarsis colectiva. Cuando llega este momento nada queda del hecho inicial, apenas unas referencias, porque en realidad se produce ya otro hecho o circunstancia. Y de esto no se puede culpar a los medios, en absoluto, sino más bien a las personas, con carencias educativas y emocionales, dispuestas a hacer del hecho primero un producto de consumo que cumpla alguna función. No podemos olvidar nuestro momento de modernidad líquida y de posverdad donde no hay aspiración por las certezas, lo que nos sitúa dentro de la caverna. Pero veamoslo en modo filosófico: Existe un empeño de la razón por disolver la desdicha, el caos, que genera cierto placer colectivo en tanto y en cuanto produce esperanza (goce). No obstante con el fin de conseguir esa esperanza las desdichas se sustituyen unas a otras y casi terminan dando igual si el goce de la esperanza está cubierto. Esto es una clase de optimismo un tanto especial pues no persigue ordenar el caos sino encontrar desordenes temporales que mantengan un orden permanente. En cierta forma supone un pseudooptimismo o un falso optimismo. El ser humano siente inclinación por el mal del mundo y el concepto del límite para recordarse a si mismo que está vivo, como triunfo sobre los otros y sobre el caos. Muy en el fondo, todo esto, oculta al depredador que tenemos dentro y a su necesidad de sentirse superviviente en lo ajeno. Por todo esto no puede ocultarse que subterráneamente la tragedia cumple una función social y antropológica de la cual nadie esta dispuesto a prescindir. Cada vez que una situación dramática aparece las personas se acercan a ella como si de un imán se tratara y sin tener en cuenta lo ancestral y primitivo de su acción. Sus ansias de conocimiento sobre lo ocurrido acaban siempre en una redención personal en la que se ven a si mismos vencedores de su propia circunstancia gracias a esa otra circunstancia ajena.


http://lamiradazurda.blogspot.com.es/2018/03/filosofia-tragica-dreamstime.html

http://www.diariodealmeria.es/opinion/articulos/Filosofia-tragica_0_1228977505.html

19 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page